En la Escucha encuentro Paz

El arte de escuchar es una tarea difícil en estos tiempos acercarnos y detenernos en ver que necesita el otro es lo que nos anima a oír con valentía apreciando la riqueza del otro, es una camino de aprendizaje hacia la compasión.

Los ruidos del mundo nos invaden, también lo hace la Tv o el celular encontrar en la escucha la plenitud del Espíritu Santo, es redescubrir en el Silencio el abrazo de Dios, es acercarnos mas a comprender su corazón como el lo hacia con la viuda, los desprotegidos ,olvidados y enfermos.

Cuando rezamos escuchamos a Dios cuando miramos a los ojos y prestamos atención encontramos la voz de Dios en el otro oímos con mas atención es como una oración contestada es aceptarme en la diferencia y encontrar en ella la plenitud de un Dios que nunca se cansa de escucharnos.

Es acaso el tiempo un obstáculo para detenernos o para dejar de contemplar la belleza de la cosas y su ritmo. Cuantas veces en mi trajinar diario no he deseado volver a casa y estar solo con mis pensamientos, alegrías ,tristezas y propios desencuentros. En ese bendito tiempo cuando se derrumban mis propios ruidos es allí donde encuentro a Dios en la comprensión de que me reafirma que no estoy solo porque se que el es el mas humilde escuchador el perfecto interesado en saber que me pasa, me acepta como soy me ama a través de su atención me repite una y otra vez que vive en mi y yo en el.

En la Sencillez y en la plenitud de la sinceridad encuentro en tan solo una palabra el aliento que necesitaba la caricia que me faltaba, todo ello llega a través de la escucha sincera y amable.

Recordemos siempre esto el escuchar no es una batalla sino un camino de reconciliación y encuentro con lo diferente a mi es salir de mi propio egoísmo. Es en esa diferencia en donde encuentro la riqueza y la plenitud de lo que el otro amigo o desconocido me quiere decir o me quiere compartir con sus matices y formas. Es abrazar la historia del otro con todos sus devenires y vaivenes.

El camino de la Paz inicia a través de la comprensión y el respeto es allí en donde encontramos a nuestro Señor el mejor de los oyentes, el gran pedagogo que nos enseño a través del amor y la entrega el ejercicio complaciente de la escucha sin prejuzgamiento, aceptando y abrazando nuestra debilidad.

Cuando pienses que solo le hablas a las paredes nunca dejes de escuchar, porque en las palabras esta el refugio de tus días es tu oración contestada en el escuchar del corazón de Dios.

Sebastian Roco*

Fragmento de una Serie de Escritos

Evangelizar la cultura a través de la Escucha y la Palabra